"La paz requiere de todas las áreas de la educación": Julián de Zubiría
Bajo la premisa de que algo anda mal con la educación de un país tan violento como el nuestro, se desarrolló en el pabellón Museo Centro de Memoria Histórica de Colombia (CNMH), en el marco de la Feria Internacional del Libro, el conversatorio ¿Cómo educar si queremos paz?, que buscó encontrar diferentes puntos de vista sobre el desarrollo formativo de los estudiantes y el papel de los docentes en la construcción de un país que piense críticamente.
En la charla, donde participaron Julián de Zubiría, director del Instituto Alberto Merani y consultor en educación de las Naciones Unidas; María Emma Wills, asesora CNMH, y dos maestros de escuelas del territorio nacional, se abordó la importancia que tienen los docentes de todas las áreas en la construcción de paz.
De acuerdo con Zubiría, algo tan importante no se le puede dejar solo a una cátedra, pues es "responsabilidad de todos los cursos y áreas de la docencia formar mejores ciudadanos, que además tengan pensamiento crítico".
En ese sentido, señaló que la escuela como está pensada actualmente inhibe la capacidad crítica de los estudiantes. "Hay que ejercitar el pensamiento, preguntar con ideas originales y sorprender al niño para que los jóvenes debatan con argumentos. Siempre se puede hacer algo en el aula para que sea lugar de imaginación y de debate", sostuvo.
A su turno, Wills precisó que la memoria puede ser un hilo para repensar a Colombia, para que sea una aliada de la paz. "Necesitamos una historia que garantice libertad de pensamiento", resaltó.
En ese sentido, sostuvo que "la historia es un campo de debate imprescindible para tener ciudadanos críticos". Y agregó que "no hay un ciudadano que logre solo con arte, sin conocer la historia, ese pensamiento crítico".
Al respecto, Zubiría puntualizó que "esta generación tiene un reto clarísimo: impedir que vuelvan trizas lo que hemos logrado. Hay que volver a sensibilizar a quienes la guerra endureció el corazón".
Finalmente, recalcó la importancia de la lectura reflexiva en el aula de clase, pues no se trata de la cantidad sino del análisis que se hace de lo leído.