JEP: fueron más de 6 mil casos de falsos positivos en Colombia
Identificación de víctimas de los falsos positivos en Dadeiba, Antioquia. Foto: JEP
La Jurisdicción Especial para la Paz indicó que los casos de víctimas de ejecuciones extrajudiciales sería mucho mayor a la que se registró por parte de la Fiscalía General de la Nación.
La Jurisdicción Especial para la Paz reveló una grave información en la mañana de este jueves, sobre el tema de los falsos positivos, como se le conoce a los civiles asesinados, que fueron presentados como bajas en combate por el Ejército Nacional.
De acuerdo con el comunicado de la JEP, fueron por lo menos 6.402 los muertos ilegalmente durante el 2002 y el 2008 y no 2.248, lo que deja un número escalofriante de 4.154 víctimas adicionales de los 'falsos positivos'.
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En la información que se conoció, se indica que se realizó un exhaustivo proceso de contrastación de información, que incluyó una base de datos y otros elementos para determinar la magnitud del fenómeno criminal.
"Por lo menos 6.402 personas fueron víctimas de muertes ilegítimamente presentadas como bajas en combate entre 2002 y 2008. El 66% del total nacional de víctimas se concentró en 10 departamentos", manifestó la JEP en el comunicado.
Se resalta que cifras oficiales y no gubernamentales coinciden con la Jurisdicción en determinar que en este periodo de tiempo se dio el mayor número de víctimas y que el fenómeno comenzó a caer en el 2009.
Dentro de la investigación, la JEP estudió subcasos, presentados en Antioquia, la Costa Caribe, Norte de Santander, Huila, Casanare y Meta.
¿Qué son los falsos positivos?
La Fiscalía General de la Nación tenía, hasta el momento, el registro de víctimas de las ejecuciones ilegales, presentadas como bajas en combate: alrededor de 2.200 víctimas del proceso criminal.
Los 'falsos positivos' salieron a la luz pública cuando el país conoció que el Ejército Nacional estaba asesinando civiles, para presentarlos como bajas en combate de subversivos y así, sustentar un supuesto éxito en la estrategia de seguridad, desarrollada en la época.
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Las familias de varias víctimas empezaron a denunciar en el 2008 los asesinatos sistemáticos, quienes caían una operación macabra del Ejército (con apoyo de los paramilitares, según muchos de los casos reportados), que tenía como fin inflar los resultados presentados sobre bajas en combate.
Durante el reporte de los primeros casos y hasta la fecha, se han encontrado fosas comunes y elementos probatorios que registran la magnitud del fenómeno, que se registra como uno de los episodios más oscuros en la historia de Colombia.
REDACCIÓN CANAL INSTITUCIONAL