Foto de La Esneda, Dosquebradas, Risaralda, luego de la avalancha del 8 de febrero de 2022.

“Debemos ir más allá de las donaciones para buscar soluciones”: gobernador de Risaralda


Foto tomada de Twitter: @UNGRD.

Víctor Tamayo, gobernador de Risaralda, explicó la magnitud de la tragedia que viven Pereira y Dosquebradas luego de la avalancha del martes, que dejó al menos 16 fallecidos.
 

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El gobernador de Risaralda, Víctor Tamayo, agradeció la solidaridad de las personas que han hecho llegar sus donaciones para los damnificados de La Esneda (Dosquebradas) y la Avenida del Río (Pereira), así como el apoyo recibido de las autoridades locales, fuerza pública, representantes del Gobierno y organismos de socorro en las labores de rescate en la zona y la atención a las víctimas.

“Debo destacar la solidaridad de la gente. Ayer llegaron bastantes ayudas y se las estamos enviando a las familias damnificadas”, dijo el mandatario departamental en Señal de la Mañana.

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No obstante, también llamó la atención sobre la magnitud real del problema respecto a la existencia, en el sector afectado el martes por los deslizamientos de tierra, de otras decenas de asentamientos que también están en peligro y frente a lo cual no hay soluciones de vivienda a la vista para reubicar a quienes habitan dichas zonas de riesgo.

“Tenemos que ir más allá para buscar soluciones definitivas a un problema tan grave”, enfatizó Tamayo sobre la necesidad de que tanto autoridades locales como nacionales unan esfuerzos para dar soluciones de vivienda a las miles de personas de escasos recursos que hacen parte de los asentamientos en riesgo por la temporada invernal.

El gobernador explicó que La Esneda es un “asentamiento subnormal”, ubicado al margen derecho del río Otún, sobre el cual se desplomó el terreno el martes dejando un saldo parcial de 16 fallecidos, más de 30 heridos y decenas de casas sepultadas por el alúd de tierra.

Así mismo, mencionó que, del otro lado del Otún, sobre la Avenida del Río (Pereira) habitan personas humildes en inquilinatos y viviendas que representan un gran riesgo para sus vidas. 

“En Pereira hay 84 invasiones, más de 10 mil personas que viven en piso en tierra, en casas construidas con plásticos y guaduas, con una comida al día. Esa es una realidad social que se vio evidenciada ayer cuando nos sucedió esta triste situación”, dijo el mandatario.

Añadió que “el problema es demasiado grave por los costos de reubicación” y porque “la gente se aferra a su pequeño terruño. (…) El problema es tan grande que una administración (departamental) no es capaz de solucionarlo en cuatro años”.

Así las cosas, Víctor Tamayo reiteró su llamado al Gobierno Nacional para que inicie un trabajo conjunto con las autoridades locales para generar proyectos de vivienda que permitan la reubicación de quienes habitan las mencionadas zonas de riesgo.

"Espero que el ministro de Vivienda nos dé una manito para avanzar en un proyecto que necesitamos urgentemente", destacó el gobernador de Risaralda.

REDACCIÓN CANAL INSTITUCIONAL.